En esta oportunidad lo avistamos en la Ruta provincial 204 pasando el Arroyo Garupá, tuve que meterme unos 100 metros por el pastizal luego de que lo avistamos con los prismáticos, afortunadamente no abandonó su posadero y pude volverme al menos con una foto rescatable ya que estaba bastante lejos y no tenía forma de acortar mas distancia, no veía donde metía mis pies y ante la duda me quedo en donde estoy seguro de lo que piso; dicen que cuando hace frío y hay humedad las víboras desaparecen pero no quiero arriesgarme.

No hay comentarios:
Publicar un comentario