El centinela del bañado se aproxima a su posadero, parece un paisaje del Iberá pero las fotos las obtuve en Nemesio Parma acá en Posadas. El Chajá a pesar de su forma poco aerodinámica, cuando vuela lo hace muy bien ya que sus alas grandes y anchas le permiten maniobrar con precisión. Pueden observar en las fotos de esta entrada la forma en la que están desplegadas las remeras primarias, todas abiertas con el objetivo de que las alas tengan mayor superficie de contacto con el aire lo que facilita la sustentación a bajas velocidades y se mejore la capacidad de maniobra, al igual que con los aviones y las superficies hipersustentadoras de las alas (Flaps en el borde de fuga, slats en el borde de ataque y winglets en los extremos).
El segundo miembro de la pareja.
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