Tordo amarillo (Saffron-cowled Blackbird) Xanthopsar flavus

Pocas especies en estos años nos causaron tal emoción y satisfacción como ésta, el solo considerar su difícil y vulnerable situación ecológica nos hace pensar que tal vez seamos una de las últimas generaciones en poder disfrutar de su belleza, ojalá puedan superar este crítico presente y catapultarse a un futuro próspero, es posible pensarlo al saber que existen personas conscientes de la importancia de conservar aquellos lugares en donde nidifican y se desarrollan, un buen ejemplo lo brinda la Familia Haynes en la Estancia Virocay llevando adelante un manejo sustentable de sus recursos de manera de permitir y promover el cuidado de los recursos naturales.
Observar esas bandadas que tiñen en cielo de un amarillo oro, flanqueado con los detalles negros de algunas porciones alares resulta casi indescriptible, la bandada levanta a la orden del individuo centinela que nota el acercamiento de cualquier amenaza, que bien puede ser un depredador en potencia e incluso fotógrafos que solo se acercan con el afán de registrar este emotivo momento.





Es sobrecogedor observar una bandada de esta especie pasando por encima de nosotros, una emoción invade y pronto el fotógrafo queda de lado y el naturalista se limita a observar y maravillarse con el espectáculo.
Momentos que apenas logran registrarse en una fotografía, pero que quedan grabados a fuego en la retina y en el alma del observador!!!
Hasta tanto una persona no tenga una experiencia profunda o un contacto íntimo con la naturaleza, no logrará comprender la dimensión real de la Biología y su objeto de estudio!!!! Y solo cuando se sienta pequeña ante la Grandeza de la Creación, logrará asimilar cual es su verdadero lugar en el mundo natural...

Habíamos hablado antes en el blog acerca de los roles de los distintos individuos en una bandada, en este caso en particular finalizo esta entrada con distintas fotografías de los "Centinelas" encargados de alertar al resto del grupo que se encontraba alimentándose en el suelo mientras los vigías acechan perchando en los tallos mas altos de los arbustos a los posibles depredadores; motivos no les faltaba porque nosotros observamos varios gavilanes volando en las cercanías.
Pueden ver como este rol puede ser cumplido por cualquiera de los integrantes de la bandada, comienzo con fotografías de los machos.



Sigo con las hembras




Y finalizo con esta para mostrar los beneficios resultantes de la unión entre muchos, aquí pueden observar a dos Tordos y un Suirirí real interactuando pacíficamente los ictéridos y los tiránidos.